Buenos días estimados representantes:
Honestamente, me es sumamente difícil escribir esta comunicación y mas difícil aún es la redacción habiendo tantos asuntos por tratar, muchos de los cuales tienen alto contenido emotivo, que si no se usan las palabras y redacción adecuadas pueden expresar un mensaje de manera confusa, inapropiada o por otra parte, resultar en interpretaciones diferentes a las deseadas. Haré mi mejor esfuerzo.
No es un secreto que desde hace cierto tiempo ha sido del conocimiento general nuestro deseo de vender el colegio. Razones para ello: para quienes lo crearon como proyecto de vida, la señora Gladys, ahora ausente físicamente, y mi persona, ya casi en 71 años con pocos años de “servicio” restantes, es injusto continuar con esta responsabilidad cuando tenemos obligaciones para con nosotros mismos. Mas aún si se desea hacer las cosas de manera apropiada; o sea, no es solo que nos quede poco tiempo sino que debemos reconocer que nuestras capacidades se han reducido y a veces tememos fallarles a nuestros estudiantes y a Uds. sus representantes, es decir, a nuestra esencia , el colegio.
Decía que hemos tratado y tratamos de vender EL Colegio a fin de que alguien que quisiera hacer la inversión lo haga por el amor a esta ocupación, que es la enseñanza y formación de jóvenes. Obviamente, no hemos tenido suerte con este objetivo.
Hay otras opciones, tantas como la imaginación pueda crear. Hemos pensado en alquilar tanto el colegio como las instalaciones, pero esto no es garantía de que quien asuma este compromiso lo hará con la meta de mantener lo que es el Instituto y llevarlo aún mas arriba que lo que ha llegado a ser. Ni que decir de las instalaciones y su mantenimiento. Tememos que pasado un período de tiempo solo quede el esqueleto y el recuerdo de lo que fue y esto es algo que no le interesa a nadie, Uds. quieren un buen colegio para sus representados y uno que mantenga su calidad por muchos años y del que estén orgullosos como lo están ahora.
Haciendo un ejercicio de tormenta de ideas (brainstorming o lanzamiento de flechas) hay opciones que valdría la pena considerar:
*Que un grupo de interesados, preferentemente representantes, forme una sociedad mercantil de algún tipo, en la cual el aporte de todos permita comprar el colegio, todo o parcialmente, de manera tal que los inversionistas reciban su beneficio por su inversión como en cualquier otro ramo mercantil.
*Podría pensarse inclusive . en la incorporación de miembros del personal que haciendo uso de sus pasivos laborales, formen parte de este grupo de inversionistas, lo cual garantizaría mas aún que haya continuidad en la forma de funcionar el Instituto.
*No es tampoco peregrina la idea de que ante un consorcio como los anteriormente mencionados se llegue a un acuerdo de alquiler con opción a compra o compra de una parte de la infraestructura y alquiler de la otra.
Es cuestión de pensarlo mas allá que comentar el contenido de esta carta, porque todos estamos interesados en que el Instituto Andrés Bello perdure, en que exista un sitio seguro y confiable en el que sus representados reciban su educación de buena calidad.
Por último, deseo recordarles que en reunión del Consejo Educativo en junio de 2016 y en la pasada asamblea de julio de 2016 les informé y que ahora reitero y escribo: la familia Arocha Silva regirá el funcionamiento de este centro de prestación de servicios educativos hasta julio de 2017.
Si ninguna de las opciones anteriores se hace realidad, o se crea alguna alternativa viable, solo nos queda la última opción, triste y dolorosa, que es cerrar y en ese sentido lo hemos informado a las autoridades educativas pertinentes.
Espero haber llegado a Uds. de la manera y con el sentido deseado.
Atentamente,
Dr. Pedro M. Arocha Rodulfo